domingo, 24 de abril de 2016

LA TERRAZA DE PEPI

Mi amiga Pepi tenía una mesa muy bonita, con un adorno en la parte superior, pero no tenía donde ponerla. La tenía guardada en el trastero, hasta que vimos un par de sillas en una calle de nuestro pueblo, sin dueño ni nadie que las reclamara. Imaginaros qué pensamos: estas son las sillas que le pueden ir bien a la mesa guardada en el olvido. Una mano con la lijadora, limpieza, aceite y pintura de un color verde alegre. El resultado, el que véis y en la terraza de Pepi han quedado preciosas. Precio, poco. ¡Valor, muchísimo!.

Isabel 2016.




 










No hay comentarios:

Publicar un comentario